8 de marzo de 2005

Tengo superpoderes I

Ayer caí en la cuenta. Soy invisible. Además me hago invisible sin querer y en las situaciones menos oportunas, como los nuevos superhéroes patosos que acaban de descubrir sus poderes.
Sí, ayer lo descubrí. Fue una revelación. Estaba en un lugar, pensando, abstraído y de repente... “soy invisible”. Un pensamiento súbito, que sin embargo, me llenó de paz. Ahora entendía el por qué de tantas situaciones inexplicables a lo largo de mi vida. ¿Te imaginas resolver todas tus dudas trascendentales de un plumazo? Pues eso fue lo que me pasó. Y me quedé muy a gusto.
He tenido la respuesta delante de la cara. Durante 26 años. La verdad es que tardar tanto en encontrar algo tan obvio es de torpes. Pero es que no soy un tío listo, que piense. Yo he sido toda mi vida de los de empollar y memorizar a saco.

A los 10 años era un chaval bastante autosuficiente. Iba solo a casi todas partes. Hacía los recados de mis padres e incluso cogía el autobús. Toda una proeza para un canijo.
Cuando iba a comprar, que se yo, a la panadería, la frutería o la pescadería, por poner un ejemplo; nunca conseguía llamar la atención del tendero de turno. Nunca jamás. Cuando me tocaba el turno, el tendero me saltaba tranquilamente y atendía a la señora que estaba detrás de mí. Muchas veces la señora se colaba sin ningún escrúpulo. Seguro que se sentía muy bien después, sabiendo que había engañado a un niño de 10 años tan fácilmente. “Jajaja, ¡qué maruja más lista que soy! Para que luego me diga la Josefa que no tengo picardía” Otras veces, la señora decía: “Que no Antonio, que no. Le toca a este chaval tan majo que esta delante mío” “Ah! Pensé que era hijo tuyo” No no. En realidad estaba tratando de disimular su sorpresa y no parecer un estúpido delante de la clientela, porque hasta ese momento no me había visto. Automáticamente el frutero pasó a encabezar mi lista negra, la cual fui ampliando con otros personajes como el matrimonio de la ferretería o los chavales del estanco.

Otro caso clarísimo que prueba mi invisibilidad. Te sitúo: bajos de Argüelles, Axia (el local de moda). El Iván con 17 años tratando de pedir su cocacola en la barra atestada de gente. Tic tac tic tac. Pasa un rato y el camarero no hace intención de verme. “Ah, claro” – pienso- “Es que hay mucha gente y no me ve”. Así que me acerco a la barra. Espero. Acecho. Y cuando se abre un ligero espacio, me engancho a la barra con las manos y tiro, para meter el cuerpo en el hueco diminuto. Después poco a poco agrando el espacio con un discreto movimiento de hombros. Como quien no quiere la cosa, me había hecho con un buen trozo de barra. “Ahora sí que me verá”. Pero no. El camarero está muy ocupado sirviendo al grupito de tías buenas. Por más que agito los brazos y digo “¡¡eeeeeeeeeeeeeh!!” el tío no me hace ni puto caso. ¿Por qué? ¿Está estresado? ¿Sólo puede ver escotes? ¿Pertenece a “¡Emborráchalas!”, una ONG que se encarga de proporcionar alcohol gratis a las tías buenas para que los tíos normales puedan tener una oportunidad? No, que va. No es nada de eso. Es porque soy invisible.
continuará...

8 comentarios:

  1. ¡¡¡Ehhh!!!! que la exclusividad de mujer invisible la tenía yo!!!

    Aunque pensándolo bien... espero que tú no seas mujer.

    Vale, te dejo ser invisible por un ratito, pero después quiero que juguemos juntitos a ser bien visibles.

    Besos de una maia.

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  2. No puedo esperar a leer la segunda parte!! Qué será lo próximo? que no te pasan en el equipo de baloncesto?

    Abrazacoooo!!

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  3. Wendeling: siento haberme apropiado de la invisibilidad. Pero es algo que no puedo controlar. Todavía soy un superhéroe novato.

    Teo: qué quieres decir? No me pasas porque no me ves? No temas, que no soy rencoroso, jijiji :P

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  4. No te paso porque si me la tiro yo hay más probabilidades de éxito. Podría pasarte en pos de la amistad. Pero ya me conoces, soy frío y sólo pienso en el bien del equipo...

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  5. En el equipo de baloncesto todos somos invisibles excepto Teo y Alfredo, por eso no te preocupes Ivan.

    Eso de la invisibilidad explica que no ligues demasiado, será contagioso??? porque yo tampoco es que sea un gigolo.

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  6. Jajajajaja!!! Aquí cada uno con su cruz!! Ahora tendría que venir MarK y contar la Historia de Nostromo en el Campus :P

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  7. Yo también tengo superpoderes. Sin duda son superpoderes mucho menos interesantes que los tuyos (jo la verdad es que la invisibilidad mola un güebo): yo consigo que las chicas se aparten de mi. ¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿que no mola?????!!!!. Cierto es que en ocasiones es un superpoder incómodo pero hay veces que mola tenerlo. ¿no? No, ya se que no; es una puta mierda de superpoder.

    Muy divertido Ivan sigue así y llegaras lejos hijo.

    Bye².

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  8. La verdad es que ser diferente es muy gacho porque nunca vas a estar agusto con las personas que quieres porque nunca sabras si te quieren por tus habilidades o por la persona que tu eres realmente, les digo esto porque se que como yo hay muchas personas que tienen "poderes" pero tambien conlleva una responsabilidad, me gustaria conocer a una chica que tuviera semejanza a mi en habilidades y no tener que ocultar esto, imaginense si supiera la gente de esto de seguro ya estaria en un centro de analisis o de investigacion... bueno solo me basta decir cuidense y nunca revelen su identidad para hacerse fama...suerte

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